cap. 1. primer encuentro

Eran las 5:00 Am, las nubes estaban densas y estaba haciendo frió afuera. Era algo muy normal en forks demasiado diría yo. No me agradaba mucho este clima prefiero en calor abrazador de Latinoamérica. Yo viví halla hace unos 7 años las imágenes son muy vivas de cuando caminaba en senderos, con el sol brillando encima de mi, broncearme en el patio con una limonada fría en mis manos; todo eso lo extraño.
Pero me vi obligada a dejar mi hogar porque transfirieron a mi papá del trabajo, pero como siempre dice mi mamá "encuéntrale el lado positivo a las cosas".
Bueno no me podía de quejar de algunas cosas, tenia muy buenos amigos como margarita y Juan aunque el ultimo se pace sequia siendo mi amigo. Me compraron un carro nuevo para mis 17 años un spark 2007 azul, bonito, sencillo y excelente para mi gusto. Me ha ido mejor en la secundaria y preparatoria comparado como me iba en primaria.

-Isabel ya te bañaste??-dijo mi mamá abriendo la puerta.
-no- dije levantándome de la cama y viendo el reloj ya eran las 5:15-perdon es que estaba pensando en muchas cosas-me gustaba hablar con mi mamá le podía confiar cualquier cosa.
-como que?- dijo comprensivamente.
-como desde que llegamos a este pueblo, en lo bueno y en lo malo, en la secundaria y preparatoria que por cierto me va mejor que la primaria y en muchas cosas más- dije sonriendo de lo ultimo.
-si, y te va a ir igual que el la primaria si no te alistas para ir a estudiar- dijo con tono burlo.
-ah, si mamá muy chistosa- dije ya adentrándome al baño.
Mi mamá era una persona comprensiva y de confianza, por eso me gustaba decirle casi todo. Ella es una mujer de estatura media y ya la había alcanzado en estatura, pelo negro ojos cafés iguales a los míos los había heredado de ella y tenia un cuerpo hermoso. Ella dice que tengo uno más bonito pero a mi eso me daba igual.

Salí del baño y me vestí con unos blu jeans entubados, baletas y una blusa manga sisa azul eléctrica y una chaqueta en jim que era ajustado con un bonito cinturón color plata igual a las baletas. Cogí mi maletín y bale las escaleras para ir a la cocina donde estaba mi hermana Angélica
-hola Ángela- le gustaba que la llamaran así. Ella se parecía demasiado a mi mamá Milena, tenia unos 13 años y era mi única hermana.
-hola Isabel, al parecer se te hizo tarde- mire el reloj y Ángela tenia razón, las clases empezaban a las 6:25 y eran las 6:05.
-si, tienes razón-tome un jugo de naranja que estaba en el frigorífico, tome mis laves del carro y salí. No vi el carro de mi papá Jaime a lo mejor ya se había ido a trabajar. Salí de la cochera y maneje hasta llegar a la preparatoria de forks.
Aparque mi carro y vi mi reloj de pulsera que tenia las 6:20.
Salí de mi carro y me encamine hasta la secretaria para que me dieran el comprobante de asistencia.
-hola señora coppe, me podrías hacer un favor?-ella asintió- me podría dar un comprobante de asistencia, el mío se perdió- dije con tono de vergüenza, aunque no la tuviera, era buena fingiendo algunos estados de emoción.
- si claro, ten aquí tengo uno- me lo extendió para que lo cogiera, y eso hice
-muchísimas gracias- dije ya saliendo de la oficina de secretaria. Apenas salí del edificio para entrar al salón de matemáticas, sonó la campana. me apresure para entrar y cuando entre para dirigirme a mi puesto vi que el que estaba al lado mío no esta
vacio.
había un chico, uno lindo, pelo castaño y despelucado, ojos color cafés dorados, piel tan blanca como la cal, un cuerpo tan perfecto como el mármol y la ropa que llevaba era ajustada así que lo hacia ver bien.
En ese momento me sobresalte, la puerta del salón se abrió y yo automáticamente me dirigí a mi haciendo cuando roce su puesto el se paro algo sobresaltado, para después dirigirse al maestro. Eran un chico nuevo escuche que dijeron atrás mío.
Después de sentarme el profesor lo mando al penúltimo puesto, al lado mío, ya que era el único que estaba disponible.
Fue en ese momento donde se encontraron nuestras miradas y me estremecí, no se porque pero eso paso.
Las 2 horas de clases pasaron demasiadas lentes para mi gusto, y sobretodo porque sentía que el chico nuevo no dejaba de mirarme-¡acoso que tenia ¿un perro en mi
cabeza?!-era seriamente fastidioso y cuando quería voltear la cabeza para ver que es lo que tanto veía y el volteaba la cabeza como si estuviera prestándole atención a la clases, esto parecía un juego y muy fastidioso.
Al finalizar la clase tenia que hacer una fila para que el profesor firmara el comprobantes de asistencias, al parecer era la única clase que teníamos que hacer una fila al final de la clase por que en las otras apenas llagábamos pasábamos el comprobante.
-ok, señor Edwin Cullen, aquí esta tu comprobante, y espero que te guste mi clase-dijo el profesor.
Entonces así se llama EDWIN ¿CULLEN? acaso dijo ese apellido?. Los cullen no tenían una muy buena fama en el instituto. Decían que eran unos raros que no se relacionan muy bien con las personas.
-aquí esta- me dijo el profesor, sacándome de mis pensamientos.
-gracias-dije. y salí a la próxima clase, literatura allí me encontraría con margarita, aunque no había visto su auto.

-hola margarita-dije
-hola Isabel-dijo un poco mas alegre de lo que yo sonaba.
-que tienes?-me pregunto algo preocupada
-nada, solo sueño- le mentí y empezó la clase. No le pude prestar atención ala clase ya que pensaba en lo que sucedió en la clase de matemáticas, aun no comprendía por que me miraba como quisiera algo.

Al finalizar la clase era la hora del almuerzo. Compre un jugo, la verdad no comprendía por que he estado así.
- te sientes enferma-esta vez era Juan el que me hablaba-hola
-hola-dije-no no me siento enferma es que no tengo hambre.
-no me digas que ahora te vas a obsesionar con eso de la vanidad-ahora hablo margarita, con tono burlón, lo cual solo me hizo sonreír.

la hora del almuerzo paso rápido. y ahora tocaba la clases de biología, mi favorita.
Cuando entre al salón me di cuenta que Edwin también estaba en esta clase.- y ahora que también estas dos horas pasaran también lentas?- me senté en mi respectivo puesto y empezaron las clases me di cuenta que el único puesto disponible estaba al lado mío-no otra vez-las horas pasaron lentas como lo había predicho. Apenas sonó el timbre del cambio de clases Edwin se paro algo incomodo y salí casi corriendo.

En educación física me encontraba con Juan, el era un chico que le gustaba los deportes y casi no deja de hablar de ello.
No era para nada buena en los deportes a mi ni siquiera me gustaban, es mas, un día le pregunte a la señorita coppe que si me podría cambiar de clase pero me dijo que era imposible, podía pero cuando se acabara el semestre, genial solo falta 3 meses para acabar el semestre.
Esta hora paso mas o menos rápido me dirigí a la secretaria para que me revisara el comprobante lo cual solo lo tengo que hacer una vez a la semana por un mes entero.

Y allí estaba Edwin tratando de convencer a la señorita coppe que le cambiara dos clases a cualquier otra.
-lo siento pero no se puede hasta acabar el semestre, créeme que te quiero ayudar pero no me es posible-dijo la señora coppe disculpándose
-ok, gracias, tendré que resistirme- y salió muy enojado casi azota la puerta.
-hola-dije extendiéndole el comprobante a la señora coppe. Ella asintió y coloco un sello en el para después extendérmelo en lo mano.
-gracias-dije y salí un poco culpable.
¿Que es lo que tenia el que me hacia sentir culpable?, ni siquiera me conoce como para que me mire así con odio-no seas boba Isabel, el ni siquiera te conoce y yo mucho menos a el, así que no te sientas así- salí a donde tenia aparcado mi carro, me subí en el y salí del instituto para ir a mi casa.
Dejando mis problemas atados en el instituto y tratando de olvidar lo sucedido.

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holaa! espero que les haya gustado este primer capitulo... por fa dejen sus comentarios =)